Si la mente lo utiliza para atacar, sea de la forma que sea, el cuerpo se convierte en la víctima de la enfermedad, la vejez y la decrepitud. Perdonar a otros es la única modo en que nosotros mismos podemos ser perdonados, luego que refleja la ley celestial según la cual adivinar es lo mismo que recibir. El Gloria es el estado natural de